Hoy me voy a poner un poco más profunda que de costumbre
para explicaros como fue mi experiencia con la lactancia y como fueron nuestros
primeros días en casa, ya sin la ayuda de comadronas.
Me subió la leche justo la noche antes de dejar el hospital,
la verdad es que me reí mucho porque de golpe y porrazo me encontré con dos
pechos exageradamente grandes a lo Pamela Anderson y con un canalillo que ni
con el mejor wonder bra !!! Me miraba en el espejo y no daba crédito !!! Pero después
del momento de risas con mi marido vino la tarea de dar de comer a nuestro bebe.
Durante el día todo parecía ir bien, fui dando el pecho, a ratos se enganchaba
bien pero rápido se soltaba y dormía muuucho, a mi me daba la sensación de que
no comía lo suficiente y les pregunte a las comadronas del hospital por las
pezoneras, pero ellas me dijeron que no, que no era necesario utilizar nada,
que el ya aprendería a engancharse bien .
Una vez en casa lo seguimos intentando pero notaba que los
pechos no se me vaciaban, y suerte de los discos de lactancia porque aquello parecían
las cataratas del Niagara !
Ya entrada la noche me empecé a desesperar, mi bebe no paraba de llorar y
no se enganchaba al pecho y yo sin saber qué hacer, os podéis imaginar mi
desespero no? Finalmente, a las 12 de la
noche mande a mi marido a buscar unas pezoneras a la farmacia de guardia.
Cuando llego me las puse e intente darle de mamar de nuevo, la primera vez no
resulto pero a la segunda por fin lo conseguimos !!!! Nil empezó a comer o vas
bien a tragar y por fin pudimos descansar todos, él con la tripita bien llena
que era lo que más me preocupaba. Que fue lo que paso ? Pues que tenia los pechos tan llenos de leche que parecian dos balones y al estar la piel tan tensa, el pobrecito no se podia enganchar bien al pezón.
Respecto a las pezoneras, no acabo de entender porque hay
tantos detractores al respecto, yo las estuve usando durante los primeros dos
meses y me fueron genial, nos ayudo a los dos y en el momento en el que quise quitárselas
por practicidad,( puesto que tienes que
lavarlas después de cada toma, esterilizarlas, llevarlas siempre contigo ... )
pude hacerlo sin ningún tipo de problema. Así que mi consejo es que, aunque seáis madres
primerizas, hacer SIEMPRE caso de vuestros instintos, nadie mejor que vosotras
conoce a vuestro bebe así que no tengáis miedo de tomar vuestras propias
decisiones, puesto que ser madre es algo que está en el interior de todas
nosotras.